Igual que en la lucha libre. ¡En esta esquina, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC por sus siglas en inglés), y en esta otra, la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés)¡
En un despliegue a nivel mundial, particularmente en los países más desarrollados, de equipamiento de comunicaciones conocida como 5G, en los Estados Unidos ha generado una controversia que se antoja de película. La FCC es la entidad gubernamental americana que gobierna y administra el espectro radioeléctrico, mientras que la FAA, gobierna y administra la seguridad aeronáutica en dicho país siguen enfrentándose en una lucha que además de técnica, se ha convertido en una lucha política y una lucha de poderes.
AT&T y Verizon emitieron una solicitud al secretario de transporte de los Estados Unidos, donde se le notifica de un retraso voluntario de dos semanas de sus lanzamientos de servicios que la banda de 5G soporta. Entre ambas empresas han invertido alrededor de $67 mil millones de dólares en licenciamiento de la banda C donde se incluye esta frecuencia.
Por otro lado, Airlines for America, que agrupa a varias líneas comerciales en Estados Unidos, emitió una petición de emergencia haciéndoles el requerimiento a las instancias reguladoras que detengan el despliegue de estos servicios en esta banda. La razón que argumentan es que las frecuencias que se manejan en 5G, son usadas en el proceso de aterrizaje seguro de las aeronaves, que en aeropuertos con condiciones de poca visibilidad, lluvia, nieve o neblina, pueden afectar la medición de altitud con respecto al piso en el momento de la aproximación a las pistas, pudiendo resultar en un desastre.
Mientras, para la industria de las telecomunicaciones, la banda C es un conjunto de frecuencias extremadamente valioso, tanto así que se le ha llamado la “frecuencia de ricitos de oro”, ya que ofrece una combinación sumamente apetecible ya que tiene una velocidad extraordinariamente rápida y una cobertura suficientemente amplia. Y por el otro lado, se tiene el uso de estas frecuencias en los altímetros de las aeronaves que usan esta frecuencia en miles de aviones a nivel mundial.
El problema no es tan sencillo porque la subasta de la FCC de febrero del año pasado le significó al gobierno un ingreso superior a los 81 mil millones de dólares por concepto de más de 5,600 licencias en la banda C, dentro de los que la mayor parte fue acaparada por Verizon y AT&T que invirtieron $44 y $23 mil millones de dólares respectivamente, mientras que por el otro lado estas frecuencias usadas en los altímetros de navegación que ocupan estas frecuencias obligarían a que los vuelos hechos por aeronaves con este equipamiento, no podrían aterrizar en varias decenas de aeropuertos a nivel mundial.
El desenlace es de pronóstico reservado ciertamente. Aquí te lo platico:
La pelea de los pesos pesados continúa
Igual que en la lucha libre. ¡En esta esquina, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC por sus siglas en inglés), y en esta otra, la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés)¡
En un despliegue a nivel mundial, particularmente en los países más desarrollados, de equipamiento de comunicaciones conocida como 5G, en los Estados Unidos ha generado una controversia que se antoja de película. La FCC es la entidad gubernamental americana que gobierna y administra el espectro radioeléctrico, mientras que la FAA, gobierna y administra la seguridad aeronáutica en dicho país siguen enfrentándose en una lucha que además de técnica, se ha convertido en una lucha política y una lucha de poderes.
AT&T y Verizon emitieron una solicitud al secretario de transporte de los Estados Unidos, donde se le notifica de un retraso voluntario de dos semanas de sus lanzamientos de servicios que la banda de 5G soporta. Entre ambas empresas han invertido alrededor de $67 mil millones de dólares en licenciamiento de la banda C donde se incluye esta frecuencia.
Por otro lado, Airlines for America, que agrupa a varias líneas comerciales en Estados Unidos, emitió una petición de emergencia haciéndoles el requerimiento a las instancias reguladoras que detengan el despliegue de estos servicios en esta banda. La razón que argumentan es que las frecuencias que se manejan en 5G, son usadas en el proceso de aterrizaje seguro de las aeronaves, que en aeropuertos con condiciones de poca visibilidad, lluvia, nieve o neblina, pueden afectar la medición de altitud con respecto al piso en el momento de la aproximación a las pistas, pudiendo resultar en un desastre.
Mientras, para la industria de las telecomunicaciones, la banda C es un conjunto de frecuencias extremadamente valioso, tanto así que se le ha llamado la “frecuencia de ricitos de oro”, ya que ofrece una combinación sumamente apetecible ya que tiene una velocidad extraordinariamente rápida y una cobertura suficientemente amplia. Y por el otro lado, se tiene el uso de estas frecuencias en los altímetros de las aeronaves que usan esta frecuencia en miles de aviones a nivel mundial.
El problema no es tan sencillo porque la subasta de la FCC de febrero del año pasado le significó al gobierno un ingreso superior a los 81 mil millones de dólares por concepto de más de 5,600 licencias en la banda C, dentro de los que la mayor parte fue acaparada por Verizon y AT&T que invirtieron $44 y $23 mil millones de dólares respectivamente, mientras que por el otro lado estas frecuencias usadas en los altímetros de navegación que ocupan estas frecuencias obligarían a que los vuelos hechos por aeronaves con este equipamiento, no podrían aterrizar en varias decenas de aeropuertos a nivel mundial.
El desenlace es de pronóstico reservado ciertamente. Aquí te lo platico:
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